Datos personales

24 dic 2013


BLANCA NAVIDAD / NEGRA TRISTEZA.


Esto es lo que yo escribía el 14 de noviembre de 2012:


Érase una vez una mujer que adoraba la navidad. Los escasos anuncios de turrones que había en televisión eran para ella el adviento, tanto o más que el calendario que su madre le compraba- entonces casi casi desconocidos-. A pesar de no haber colegio madrugaba el día de la lotería-anuncio oficioso de la navidad-, entonces y ahora para ver cantar a los niños (no había niñas) de San Ildefonso y sobretodo para ver el proceso de vaciado de las bolas en los bombos, lo más emocionante del sorteo¡¡¡.
A pesar del cambio total de circunstancias, de la desaparición de seres queridos, de la ausencia de esos amigos que por avatares del destino se quedaron por el camino, sigue adorando la navidad. A pesar de...todo...si, porque para ella sigue siendo la época más bonita del año, también es cierto que es -contradictoriamente- la más triste. Es cuando esa sensación de soledad se aumenta, cuando ese sentimiento de nostalgia se agudiza, cuando nos embarga la tristeza... y todos, parecen más felices que tú, con una vida más plena que la tuya...la maldita y eterna comparación, sentimiento humano donde los haya. Por no hablar de los malditos petardos de ruidos ensordecedores, del alborozo generalizado que se respira en el ambiente, que hace estacar más tu tristeza.
Uno es uno, con la familia que le ha tocado en suerte, o en desgracia, con las circunstancias que le acompañan...y con su vida, la presente, la que hay...Eso sí, siempre nos quedaran las muñecas de Famosa...nuestros recuerdos, por suerte, no desaparecerán jamás. 


Esto es lo que escribo hoy,  el 24 de diciembre de 2013:


¿Y QUE SE HICIERON DE LOS PAJES DE LOS REYES MAGOS?.

http://procoleccionismo.blogspot.com.es/2011/12/una-coleccion-de-decimos-del-sorteo-de.html

Ayer fui sola al "mercado de arriba" como decía mi madre y mi hermana y yo misma-es más lo sigo diciendo-. Nada y todo es igual. Todo y nada es diferente. El espíritu del mercado de arriba es como el de los fantasmas del Cuento de Navidad de Charles Dickens; me visita el fantasma de las navidades pasadas, presentes y futuras, y son tantos, pero tantos eslabones de cadena los que arrastro. Por cierto, que vimos las tres la película en el desaparecido Cine de Moratalaz, y recuerdo perfectamente que me daba un miedo atroz cada vez que sonaba el reloj, y esa escena de "caída libre" en la sepultura (no sé siquiera si había una secuencia así). El cine era uno de esos de barrio, de sesión continua que cortaba en mitad de la proyección para que se fuera al bar del descansillo.
Pero volvamos al turrón. Son tantos los recuerdos que me faltan hojas y letras que transcribir.
Acabo pronto, ¿porque nadie se acuerda ya de los tres pajes de los reyes magos en el belén?. Seguro que si, que hay mucho personal que los recuerde. Yo estuve en Nueva York City en Acción de Gracias, que se me juntó con la prenavidad. Allí, los Papas Noeles que tocan la campana por la calle están en su contexto, forman parte de la navidad neoyorkina- y de otras navidades-, al igual que San Nicolás. Pero aquí, en todo caso tendría que haber calendarios de adviento, personajes por las calles, regalos, etc., con personas disfrazadas-o el propio buey, o mula o la virgen, o el niño o san josé, o el angel, la lavandera, etc....-
Mi prenavidad era cuando mis abuelos traían a Madrid la matanza, mi adviento ya lo dije en lo que escribí el año pasado y mi navidad comenzaba cuando me levantaba prontísimo, me preparaba un chorizo de los de adobo en aceite de la abuela y veía todo el protocolo previo de los bombos de la lotería, que era lo que más me gustaba del sorteo.
Ahora ni siquiera me entero si es navidad o no. No veo la tele, no tengo relojes en casa. Eso si, no me ha tocado ni una perra chica de lotería, siendo con mucho, el año que más jugué y regale.
Escribí lo de este año sin leer lo que decía en el anterior, de hecho lo aabo de leer según lo escribo. Como se ve, pocas cosas ha cambiado en la navidad de Laura, miento, este año no veo la televisión y que para mí este año no es la época más triste.